KOLCHAK: THE NIGHT STALKER. ENTREVISTA CON SU CREADOR JEFF RICE (1ª PARTE)

El Rondador Nocturno (The Night Stalker, 1972). Una de las películas de más alta categoría de la historia de la TV. Aunque parezca extraño, fue un libro antes de ser una película, y lo que van a leer ahora es la entrevista que les concedió Jeff Rice (creador de Kolchak) a Al Satian y Heater Johnson, y que fue publicada en la Revista Monsters Of The Movies en 1973.

Pregunta: ¿Escribió usted El rondador nocturno como novela o como obra para la pantalla?
Respuesta: Originalmente la escribí como novela, bajo el título de Los Documentos De Kolchak.


P: ¿Fue alguna vez anunciada bajo ese título?
R: Este es el título bajo el cual empezaron el telefilme. Después, antes de que empezaran verdaderamente a filmar lo cambiaron por Las cintas de Kolchak. El primer día de filmación volvieron a los documentos de Kolchak, porque acababa de ser presentada Las Cintas de Anderson. Mientras seguía adelante la filmación decidieron que este título no les gustaba, de modo que pasó por diversas evoluciones. En cierto momento pareció que se iba a llamar Fee Fi Fo Fum, huelo la sangre… Por fin se decidieron por el Rondador Nocturno, que yo pensaba que era “original”, puesto que en 1964 se había producido una película con Robert Taylor y Bárbara Stanwyck, titulada El Paseante Nocturno.

P: Exactamente, ¿cuál es la evolución de su historia original?
R: Terminé El rondador nocturno exactamente a medianoche del 31 de octubre de 1970. La escribí en parte porque siempre había deseado escribir una historia de vampiros, pero, sobre todo, porque quería escribir algo que estuviese relacionado con Las Vegas –para poder decir algunas cosas que yo consideraba que se debían decir sobre la ciudad, sobre el modo como es gobernada por los políticos locales, sobre su policía, etc.


P: ¿Vive usted allí? ¿Fue educado allí?
R: Vivo allí ahora. Fui periodista policiaco en el Las Vegas Sun durante dos años, y resido en la ciudad desde 1955, por lo que creo que conozco “algunas” cosas sobre ella. Se han escrito muy pocas novelas con escenario en Las Vegas, donde la ciudad propiamente fuese parte intrínseca de la obra.

P: ¿No es, pues, un fondo?
R: No es un fondo, en absoluto. Todo el asunto de mi historia se basa en que un vampiro podría vivir fácilmente en Las Vegas sin que nadie encontrase nada extraño en el personaje –nadie sospecharía que es un vampiro-, porque siempre se encuentran cadáveres en el desierto circundante, mucho después de que han sido abandonados allí. Encontraron precisamente uno el día que yo marché de Las Vegas para venir aquí.

P: ¿Cómo supo usted que sentían interés por su libro para pasarlo a la pantalla?
R: Nadie estaba interesado por mi libro. Todo esto ocurrió por pura casualidad.


Yo estaba a mitad de escribirlo y, debido a una serie de accidentes y circunstancias que no son terriblemente interesantes para que se expliquen aquí, la historia y yo mismo entramos en contacto con un agente, Rick Ray, de la Adams, Ray y Rosenberg. Ray examinó el libro el fin de semana del Día de Acción de Gracias de 1970, me llamó el viernes siguiente y me dijo: ¡Es bueno! Lo representaré y pienso que lo podré vender más aprisa como obra para el cine que para ser impresa como libro. Y después me preguntó: “¿Necesita usted dinero aprisa?” Yo dije: “Sí, desde luego, lo necesito y rápido”. No se manifestó demasiado interés hasta que por fin llevó el libro a Allan Epstein, de la productora ABC.


El señor Epstein lo leyó en una noche y dijo: ¡Me lo quedo, lo compro ahora mismo! La operación se efectuó en abril de 1971. Y después, Richard Matheson, que frecuentaba la oficina, un día lo cogió, lo leyó y dijo: ¡Yo he de hacer la versión cinematográfica de esto!